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Los proyectos ‘Protegemos las escuelas’ y ‘Transformamos los patios’ fueron los protagonistas de la jornada de formación para los Representantes Municipales en los Consejos Escolares de centro de Barcelona, celebrada este martes 16 de marzo.

Conducida para Marta Carranza, secretaria del Consejo Educativo de Barcelona, la sesión presentó estos dos proyectos con la finalidad de que los Representantes Municipales los den a conocer a los Consejos Escolares y a la comunidad educativa de los centros.

Francesc Magrinyà, consejero de Urbanismo y Movilidad del distrito del Eixample, arrancó la jornada explicando que el origen de los proyectos actuales de transformación de los entornos escolares y los patios surgió en el Eixample, a partir de las propuestas de diversas AFAs que se canalizaron desde el distrito.

De esta manera se puso en marcha el programa ‘Llenamos de vida los entornos escolares’ que permitió mejorar 13 entornos escolares del distrito a lo largo del anterior mandato con un formato participativo con las escuelas. Según Magrinyà, desbordados por el éxito de la experiencia originaria en el Eixample, desde el Ayuntamiento se decidió de extenderlo a las escuelas de toda la ciudad.

Así nació en este mandato el proyecto ‘Protegemos las escuelas’, que fue presentado en la sesión a cargo de Pilar Lleonart, jefa del Departamento de Barrios Educadores del Instituto Municipal de Educación. El objetivo de esta iniciativa es la de mejorar la calidad ambiental de los entornos escolares, mejorar la habitabilidad y pacificar el tráfico, así como implicar y potenciar las comunidades educativas y vecinales. La voluntad final es la de hacer el entorno escolar más amable y facilitar así el encuentro de las familias, de los niños y niñas o el juego fortuito.

El año 2020 participaron en el proyecto 25 escuelas, representante además de 9.000 alumnos y alumnas, mientras que este año, la cifra se ha incrementado con 53 escuelas y más de 17.000 alumnos. El reto fijado es que en el 2023 se llegue a 200 centros educativos.

Este proyecto se ha acompañado de una herramienta de cocreación, con el fin de incorporar la mayor participación de la comunidad educativa y, especialmente, de los niños y niñas en la mejora del entorno escolar. Este curso se ha iniciado una prueba piloto muy bien valorada que ha implicado 10 escuelas, 102 niños y niñas y 62 familias.

Por su parte, Emma Cortés, coordinadora de proyecto del Instituto Infancia y Adolescencia de Barcelona, ha explicado el proyecto ‘Transformamos los patios’, que quiere trabajar de forma sistémica la transformación de esta infraestructura, entendiéndola como valiosa no sólo para la escuela sino también para el barrio. El objetivo es que cada año se mejoren como mínimo los patios de 12 escuelas.

En el marco de este proyecto, se ha hecho todo un trabajo previo para establecer cuáles son los seis criterios que tiene que tener un patio naturalizado, coeducativo y comunitario. Estos criterios sirven de paraguas general a partir del cual cada escuela puede hacer su propuesta a través de un grupo motor que ha constituido.

Por último, Maria Truñó, comisionada de Educación del Ayuntamiento de Barcelona, explicó que estos dos proyectos presentados forman parte de las prioridades políticas del mandato, ya que se quiere trabajar con la idea de transformar la ciudad desde las escuelas, poniéndolas en el corazón de los barrios y demostrando que todo aquello que pasa importa para hacer comunidad.

Según la comisionada de Educación, se aborda la intervención en los patios con el fin de avanzar hacia la educación y el juego al aire libre y también para luchar contra la emergencia climática, y, a la vez, se pacifica el entorno escolar y se gana espacio público para convertirlo en lugar de estancia y de encuentro. Para Truñó, todo este planteamiento comporta una transformación urbana para mejorar la vida de todos los ciudadanos de la ciudad y, especialmente, de los niños y niñas.

Finalmente, la Jornada se cerró con un turno de preguntas dirigidas a los presentes.